Publicado 30 de abril de 2025 en Prácticas Agrícolas por VeryAgro
Una manta térmica, también llamada paño o manta antiheladas, es una innovación agrícola que se está haciendo cada vez más popular. Se utiliza para proteger los cultivos de las heladas, el viento y otras condiciones ambientales adversas. Con los problemas climáticos actuales, es cada vez más importante que los agricultores encuentren formas de mantener protegidos sus cultivos. Una manta térmica ofrece un método asequible y fácil de usar para conseguirlo. En este artículo, hablamos de cómo instalar una manta térmica para cultivos para protegerlos de las condiciones meteorológicas adversas.
En muchas partes del mundo, las heladas y las temperaturas de congelación pueden dañar los cultivos, reduciendo considerablemente su rendimiento. Además, el viento, el granizo y las heladas también pueden afectar negativamente a la salud de un cultivo. El uso de una envoltura, o manta térmica, puede ser una forma eficaz de proteger los cultivos y evitar daños. Una vez instalada correctamente, una manta térmica crea una barrera de aislamiento que protege el cultivo contra las heladas, el viento y otros elementos adversos.
Para instalar una manta térmica para cultivos, necesitará los siguientes materiales:
Manta térmica: La manta térmica es un material de tela tejida que se puede colocar sobre las plantas para crear una barrera protectora. Puede estar fabricada con distintos materiales, como polipropileno, poliéster o polietileno.
Clips: También puede ser necesario utilizar clips y pasadores para mantener la manta en su sitio. Pueden ser de plástico o de metal.
Cinta métrica: Sirve para medir la superficie que hay que cubrir.
Cuchillo: Un cuchillo afilado sirve para cortar la manta a la medida adecuada.
El proceso de instalación de una manta térmica es sencillo. He aquí los pasos:
Paso 1: Medir
Mida la zona en la que se utilizará la manta térmica. Esto ayudará a determinar la cantidad de material de la manta que se necesitará.
Paso 2: Cortar la manta
Corte la manta al tamaño adecuado con un cuchillo afilado. Tenga cuidado de cortar la tela en línea recta, esto garantizará una cobertura uniforme.
Paso 3: Colocar la manta
Coloque la manta sobre los cultivos para crear una capa protectora. Asegúrese de cubrir toda la superficie de los cultivos, para que no quede ninguna parte expuesta.
Paso 4: Fijar los bordes
Utilice clips o pasadores para fijar los bordes de la manta. Así mantendrá la manta en su sitio y evitará que salga volando en caso de viento fuerte.
Una vez instalada, la manta térmica ayudará a proteger los cultivos de las heladas, el viento, el granizo y otros elementos adversos. Sin embargo, es importante vigilar la temperatura y quitar la manta si es necesario. Si la temperatura sube lo suficiente como para provocar sudoración bajo la manta, será necesario retirarla para evitar la formación de moho. Además, si las condiciones meteorológicas cambian y los cultivos dejan de necesitar protección, hay que retirar la manta.
Una manta térmica puede ser una forma eficaz de proteger los cultivos de las heladas, el viento, el granizo y otras condiciones ambientales adversas. El proceso de instalación de una manta térmica es fácil y puede realizarse relativamente rápido. La manta crea una barrera aislante que ayuda a proteger los cultivos de los elementos. Sin embargo, es importante vigilar la temperatura y retirar la manta si es necesario. Con los cuidados adecuados, la manta térmica puede ser una inversión valiosa que ayudará a proteger la salud y la productividad de sus cultivos.