Publicado 12 de junio de 2024 en Prácticas Agrícolas por VeryAgro
Podar un ciruelo es crucial para su salud y productividad. Pero para hacerlo correcta y eficazmente, debes seguir ciertos criterios clave. He aquí los principales factores que debes tener en cuenta al podar un ciruelo.
La mejor época para podar un ciruelo es a finales de invierno, justo antes de que aparezcan las yemas. Podarlo entonces le dará tiempo suficiente para sanar antes de que llegue el clima más cálido. También se puede podar en verano, pero hay que hacerlo con cuidado para no dañar el árbol. No se recomienda podar en otoño, ya que puede dejar al árbol más susceptible de sufrir lesiones durante los meses de invierno.
El objetivo final de la poda de un ciruelo debe ser crear una estructura fuerte y dar forma al árbol para mejorar la circulación del aire y maximizar la luz solar. Las técnicas de poda, como el aclareo, el despunte y la poda de los brotes de agua y los chupones, deben realizarse con estos objetivos en mente. La poda también debe hacerse para eliminar la madera muerta, moribunda o enferma, y para fomentar el crecimiento nuevo.
Las herramientas más esenciales para podar un ciruelo son unas tijeras de podar afiladas y limpias, una sierra de corte o podadora para las ramas más grandes, y podadoras de pértiga si tienes un árbol más grande.
Aclareo: El aclareo sirve para abrir la copa del árbol y permitir que penetren más luz y aire. Debe hacerse eliminando las ramas por su base para evitar que se propaguen enfermedades y plagas. Adelgaza las ramas que se cruzan o se tocan y las que están demasiado juntas.
Retirada: La retirada debe utilizarse para reducir el tamaño de una rama y dirigir su crecimiento en una dirección determinada. Para desmochar una rama, córtala justo por encima de una yema o brote lateral.
Desmoche: El desmoche es la eliminación de la rama central del árbol para crear una forma de crecimiento extendida. Esta técnica sólo debe utilizarse en árboles jóvenes y puede ser una buena forma de reducir la altura de un árbol.
Eliminación de brotes de agua y chupones: Los brotes de agua y los chupones son brotes débiles de crecimiento rápido que pueden predominar y causar sombra y apiñamiento del árbol. Elimina estos brotes en cuanto surjan para evitar que se conviertan en un problema.
Después de podar un ciruelo, asegúrate de limpiar todos los restos del árbol y eliminarlos adecuadamente. Aplica una pequeña cantidad de abono a las raíces del árbol y riégalo bien para ayudarle a recuperarse del estrés de la poda.
Podar un ciruelo puede ser una experiencia gratificante si tienes las herramientas adecuadas y sigues las técnicas apropiadas. Ten en cuenta estos criterios clave al podar un ciruelo para que produzca frutos sanos y abundantes.