Publicado 20 de noviembre de 2024 en Prácticas Agrícolas por VeryAgro
Los cultivos de patata son susceptibles a varias fisiopatologías, cada una con sus propias características y efectos sobre la planta y el fruto. En este artículo se exponen las fisiopatologías más importantes en el cultivo de la patata, así como los métodos para prevenir y tratar estas enfermedades.
El tizón temprano, también conocido como Alternaria solani, es una enfermedad destructiva causada por un hongo que afecta a los cultivos de patata. El tizón temprano produce esporas fúngicas que se dispersan por el aire y se propagan fácilmente a otras plantas. Los primeros síntomas del tizón temprano son pequeñas lesiones oscuras en hojas y tallos, seguidas de la caída de las hojas y la disminución del rendimiento.
Para prevenir el tizón temprano, es importante practicar la rotación de cultivos, plantar variedades resistentes y utilizar un riego adecuado. También se pueden utilizar fungicidas para evitar la propagación de la enfermedad.
El tizón tardío, también conocido como Phytophthora infestans, es otra enfermedad fúngica destructiva que afecta a los cultivos de patata. El tizón tardío fue el responsable de la hambruna de la patata irlandesa de la década de 1840 y sigue siendo una amenaza permanente. Los primeros síntomas del tizón tardío son el marchitamiento y el amarilleo del follaje, seguidos de la aparición de lesiones blancas o parduscas en las hojas. Puede extenderse muy rápidamente y devastar campos enteros.
Para prevenir el tizón tardío, es importante practicar la rotación de cultivos, utilizar variedades resistentes y espaciar correctamente las plantas.
Varios virus también pueden afectar a los cultivos de patata, como el virus Y de la patata, el virus S de la patata y el virus del enrollado foliar de la patata. Estos virus pueden provocar decoloración, malformación y degeneración de las patatas.
Para prevenir la propagación de las enfermedades víricas, es importante mantener la zona de cultivo de patatas libre de malas hierbas y limpiar a fondo las herramientas o equipos utilizados en el campo. Plantar variedades resistentes también puede ser una medida eficaz.
La podredumbre negra es una enfermedad bacteriana causada por Pectobacterium atrosepticum que puede provocar la pudrición de los cultivos de patata. Los primeros síntomas de la podredumbre negra son manchas encharcadas en el follaje, seguidas de marchitamiento y una pudrición blanda de toda la planta. Esto también puede conducir a la formación de estolones y tubérculos ennegrecidos o podridos.
Para prevenir la podredumbre negra, es importante utilizar semilla de patata certificada, practicar la rotación de cultivos y aplicar fungicidas adecuados.
La marchitez por Fusarium es una enfermedad causada por el hongo Fusarium oxysporum que puede afectar a los cultivos de patata. Los primeros síntomas de la marchitez por Fusarium son el marchitamiento, el amarilleo y el enrojecimiento del follaje, seguidos de una disminución de los tubérculos. Esta enfermedad puede ser especialmente difícil de controlar una vez que se ha introducido en el cultivo.
Para prevenir la marchitez por Fusarium, es importante practicar la rotación de cultivos, utilizar semillas de buena calidad y espaciar adecuadamente las plantas. Aplicar fungicidas como tratamiento preventivo también puede ser eficaz.
Los cultivos de patata pueden verse afectados por varias fisiopatologías diferentes, cada una con sus propias características y efectos sobre la planta y el fruto. Para prevenir y tratar estas enfermedades, es importante practicar la rotación de cultivos, plantar variedades resistentes, utilizar semillas de buena calidad y aplicar fungicidas adecuados. Tomando las precauciones necesarias, los cultivadores de patata pueden ayudar a proteger sus cultivos y aumentar sus rendimientos.